JERBO
¿Qué necesito para un jerbo?
ÍNDICE DEL ARTICULO
¿QUE ES UN JERBO?
Este pequeño roedor, también llamado rata del desierto debido a sus orígenes. Están ubicados en desiertos del norte de África, Europa oriental y Asia. Pertenece a la familia de los múridos, igual que las ratas o los ratones. Por eso su pequeño tamaño. Suele medir unos 10 cm su cuerpo y le tendremos que añadir la cola, que acostumbra a ser de un tamaño parecido al del cuerpo. A diferencia de sus parientes los ratones, es peluda. Su peso también es poca cosa, desde los 50 gr a los 120 gr. Y tienen una esperanza de vida más bien corta, unos 3 o 4 años, si los cuidados que recibe son los adecuados.
Su color original es el marrón o gris, con la panza blanca, que les sirve para camuflarse de los depredadores en su hábitat natural. Aunque hoy en día, los criadores han conseguido más de treinta colores distintos a base de cruces.
Una de las diferencias más destacadas de sus primos los ratones, es que sus patas traseras son más largas y tienen pelo en los dedos. Esto les es útil para poder desplazarse pegando grandes saltos. Así pueden escaparse de los depredadores que ven una presa fácil en ellos, o eso es lo que creen. Sus dedos peludos les aíslan de las extremas temperaturas de los terrenos arenosos donde suelen vivir.
Su espalda también está más recta que los otros roedores, pudiéndose erguir apoyado en sus patas traseras como si de un canguro se tratase.
Posee unos ojos grandes para poder ver de noche y unas orejas a la par, que le sirven para oír mejor y regular la temperatura.
Todas estas características han hecho que este pequeño animalillo, pueda sobrevivir a parajes hostiles y con depredadores al acecho constantemente, durante tanto tiempo.
TIPOS DE JERBOS
Existen varios tipos de jerbos, aunque el más adaptado a nuestros hogares es el jerbo de Egipto. A continuación, vamos a presentar una lista de los tipos de jerbo más comunes para que los conozcáis un poco mejor.
TE CONTAMOS POR QUÉ DEBES TENER UN JERBO COMO MASCOTA
Hace años, los jerbos eran más utilizados que las ratas en los laboratorios. Su carácter dócil y sociable, hizo que los propios cuidadores se los llevasen a sus casas para tenerlos de mascotas. Poco a poco fueron desapareciendo de los laboratorios, cobrando más protagonismo las ratas.
El jerbo es un animal muy inteligente y curioso además de sociable. Aunque las hembras tienen un carácter más temperamental, incluso se pelean en época de celo. Son animales gregarios, por eso no es recomendable tener solamente uno. Están acostumbrados a vivir en comunidad y a dormir juntos para protegerse del frio. Se comunican mediante sonidos de alta frecuencia imposibles de oír por nosotros los humanos.
Muchos de los roedores que solemos tener como mascotas se diferencian entre ellos, en que o duermen de día o duermen de noche. Estos pueden dormir tanto de día como de noche y estar activos cuando menos os lo esperéis. ¡Y no les gusta nada que los despierten!
El jerbo cuando juega da unos pequeños mordisquitos, pero no hacen daño, ni siquiera traviesan la piel. Sacarlos de su jaula para jugar con ellos les encanta, pero siempre con nuestra supervisión. Tenéis que pensar que son animalillos muy curiosos y que todo lo muerden, incluso los cables. Seguro que disfrutareis como niños al poder interactuar con este tipo de animales tan cariñosos. Además, al ser tan pequeños casi ni ensucian, ni desordenan, o sea, que después va a ser muy fácil recoger. Eso sí, es recomendable que, si tenéis peques en casa, les expliquéis muy bien cómo deben interactuar con este tipo de mascotas.
Primero de todo, les tenemos que hablar con voz suave, no olvidemos que tienen un sentido del oído muy desarrollado. Antes hemos dicho que para jugar muerden, aunque no hagan daño, un niño pequeño se puede asustar. Por el contrario, el que se asusta es el jerbo, porque se siente presionado o acorralado, no podemos olvidar que es un animal, y como tal se defenderá. Y entonces la mordedura puede que sea un poco más fuerte. Otro factor a tener en cuenta, es que son animales pequeños y frágiles, ¡ojo no los pisemos o aplastemos!
Y la última recomendación para poder jugar con ellos. Es que, si se nos ocurre cogerlos por la cola, como hemos visto los que hi ha tenemos una edad, en una serie de TV con los ratones para comérselos. El jerbo activará un mecanismo de defensa, y se soltará la cola para no recuperarla jamás.
ADOPTAR Y COMPRAR JERBOS. TODOS LOS CONSEJOS.
Antes de escoger los jerbos, tenéis que saber que lo mejor es que escojáis los que parezcan más activos. Si están descansando, pedirle al vendedor, que los despierte con cuidado y observad su reacción. Se tienen que despertar rápido y empezar a explorar su entorno. Los ojos de los jerbos tienen que ser brillantes y vivarachos. Y en su trasero no puede haber restos de heces ni ningún tipo de mancha. Su respiración tiene que ser limpia, si producen algún tipo de ronquido, podrían tener infección de pecho. Además, su pelo tiene que ser suave. Los jerbos que están en una esquina quietos y encorvados, es muy probable que tengan algún tipo de problema. No los compréis, pero no está de más averiguar que les pasa. Puede que no estén recibiendo los cuidados necesarios por parte del vendedor.
Es muy recomendable que vivan en grupo, como mínimo dos del mismo sexo. Y que tengan entre 6 y 8 semanas de vida cuando los acojáis en vuestra casa. También es importante que procedan del mismo lugar y que tengan la misma edad. No es imposible hacer convivir jerbos de diferentes orígenes o edad, pero os va a traer más trabajo, porque seguramente se pelearán entre ellos.
Su temperatura ideal está en el rango de 18 a 28 grados y que no haya corrientes de aire. También es recomendable que les del sol diariamente, pero solo un ratito. Les ayuda a absorber vitaminas y que el calcio actúe en sus dientes. Pero nunca los debéis exponer a altas temperaturas, en verano es mejor no sacarlos demasiado y siempre controlándolos.
Al ser unos animales pequeñitos y que en su hábitat natural tienen que sobrevivir a inclemencias de todo tipo, son unos animales propensos a asustarse. Eso hace que tengan el instinto de esconderse o pegar saltos al menor susto. Es muy curioso ver que cuando detectan peligro, tamborilean con sus patas traseras para avisar al resto de su comunidad. Un movimiento que también utilizan cuando están cortejando para aparearse.
Si lo que tenéis en vuestra casa son hembras, podréis observar que cuando entran en época de apareamiento, les cambia el carácter completamente. Necesitan a los machos desesperadamente y se lo hacen notar como sea, hasta que se dan cuenta. Estos las montan constantemente, de hecho, tienen el récord mundial de apareamientos por hora. Además, su celo es muy seguido, lo normal es que lo tengan cada cuatro días y les dure un mínimo de doce horas. Como ya hemos dicho las hembras tienen un carácter más difícil, eso hace que tengan tendencia a pelearse más entre ellas para asegurarse el apareamiento con el macho. No es muy recomendable tener más de tres hembras en comunidad, y con eso todavía puede haber problemas. Tampoco es recomendable tener más de cuatro machos en una misma comunidad por problemas de dominación, y menos juntarlos con otras especies de animales.
La conclusión, es que, si mejor que no estén solos porque se deprimen, y si son demasiados se pelean. Mejor tener una pareja del mismo sexo para evitar que críen y seguro que así serán felices.
Otro rasgo común entre roedores, pues es eso, que son roedores y sus dientes no paran de crecer. Destruyen la mayoría de juguetes de plástico que les podáis comprar. Así que lo mejor y además les encanta, es que tengáis un suministro importante de rollos de cartón, tipo cocina o WC y se los vayáis suministrando a medida que los van haciendo trizas. Os traerá el trabajo de recoger los trocitos, pero os saldrá muy barato, me atrevería a decir que gratis.
CONSEJOS DE HIGIENE PARA JERBOS
Los jerbos son unas mascotas muy limpias, al ser casi obligatorio tenerlos en parejas, ellos mismos se van a limpiar uno al otro. Pero tener una bandeja con arena de roedores, lo que llamaríamos baños secos, es recomendable, porque les encanta revolcarse con la arena para sentirse limpios. Su olor tampoco es fuerte. Además, hacen sus necesidades en un lugar opuesto a donde comen o duermen. Por lo tanto, ya sabréis el lugar de la jaula que tendréis que limpiar más.
Otro aspecto del comportamiento de los jerbos, es que les gusta mucho enterrar su comida en el lecho. Eso hará que tengáis que cambiarlo de vez en cuando para evitar la proliferación de patógenos y el mal olor. Pero no os paséis, esconden la comida para encontrarla después, si lo cambias demasiado a menudo no les va a gustar. Con una vez cada tres o cuatro semanas bastará.
¿CÓMO ENTRETENER A LOS JERBOS?
Es muy necesario para ellos, sacarlos de sus jaulas periódicamente para que puedan moverse libremente, y recorrer distancias más grandes de las que disponen dentro de sus jaulas. Pero eso siempre lo tendréis que supervisar, y que sea en un entorno a prueba de roedores. Cuidado con los agujeros por donde se pueden escapar, materiales que puedan morder, sobre todo los cables, y que no tengan escondites donde después no los podáis encontrar. Venden unas bolas de plástico, donde se les puede meter dentro, y se suelta el roedor por la casa sin peligro Son seguras y a muchos tipos de roedores les gusta, pero no al jerbo. Le resulta estresante, mejor que no la compréis, solo gastaréis dinero y vuestra mascota no la va a utilizar.
Si una vez que están sueltos os resulta difícil volver a cogerlos, ya que son muy escurridizos, existen dos formas muy sencillas de conseguirlo. Una es que dejéis la jaula abierta, ellos cuando se cansen van a volver a ella, ya que la reconocen como su hogar. Pero claro, puede que no dispongáis del tiempo para esperar que esto pase. O que el lugar donde los podéis dejar sueltos no sea donde está ubicada la jaula. No pasa nada, existe otra forma más sencilla. Solamente tenéis que disponer de un tubo, para ellos es irresistible. Lo dejáis en el suelo y os poneis en un extremo, seguro que no va poder evitar la tentación de entrar por el otro extremo y ¡ya ha caído en la trampa!
¿QUÉ TIENE QUE TENER LA JAULA DE UN JERBO?
La ubicación de la jaula debe estar en el interior de la casa para evitar corrientes y el sol. Si la jaula está en un lugar donde estéis habitualmente, mejor. Eso ara que los animalillos se acostumbren a vosotros y vayan cogiendo confianza.
Tenéis que pensar, que les gusta mucho escarbar y hacer túneles. Constantemente están de reformas, podréis observar que no paran de cambiar la forma y la dirección de estos. Así que lo mejor es que como más profundo sea el lecho, mejor se lo van a pasar y por consecuencia, más felices serán. El material de este sustrato no puede ser nunca de virutas de pino o de cedro, es malo para su salud. En general el serrín no es muy recomendable ya que, al ser tan finito, puede irritar sus ojos y nariz. Lo mejor es que sea de virutas de madera. Siempre evitando los dos tipos que hemos mencionado anteriormente, y que no contengan aceites para evitar algún tipo de alergia. Como ya sabéis, a los jerbos les encanta roer, y con estas virutas van hacer lo mismo.
La ubicación de la jaula debe estar en el interior de la casa para evitar corrientes y el sol. Si la jaula está en un lugar donde estéis habitualmente, mejor. Eso ara que los animalillos se acostumbren a vosotros y vayan cogiendo confianza.
Tenéis que pensar, que les gusta mucho escarbar y hacer túneles. Constantemente están de reformas, podréis observar que no paran de cambiar la forma y la dirección de estos. Así que lo mejor es que como más profundo sea el lecho, mejor se lo van a pasar y por consecuencia, más felices serán. El material de este sustrato no puede ser nunca de virutas de pino o de cedro, es malo para su salud. En general el serrín no es muy recomendable ya que, al ser tan finito, puede irritar sus ojos y nariz. Lo mejor es que sea de virutas de madera. Siempre evitando los dos tipos que hemos mencionado anteriormente, y que no contengan aceites para evitar algún tipo de alergia.
Como ya sabéis, a los jerbos les encanta roer, y con estas virutas van hacer lo mismo. Van a construir túneles con las piezas que obtengan más pequeñas, y los nidos con las más grandes. Les ayuda mucho que, mezclado con la madera, pongáis tiras de papel, siempre sin tinta, que se lo ponen en la boca y les puede causar alergias. Servirá como pegamento para la construcción de sus túneles, el papel higiénico o los pañuelos de papel, es lo mejor.
Esta jaula tiene que ser lo más grande posible, un metro de largo por 50 cm de profundidad, está bien. Nunca de plástico o de rejas que se puedan colar entre ellas, o puedan quedarse atrapados entre ellas. Un terrario, es una buena opción.
Ya sabéis como construir la parte baja de la jaula, ahora toca la parte alta. Como más altas sean las paredes de su casa mejor. Así les podréis poner diferentes pisos para que puedan moverse por las rampas o túneles, que les podéis instalar. Tenéis que tener en cuenta, que como mínimo cada piso ha de tener una altura de quince centímetros para que se pueda poner de pie. El suelo de los pisos no puede ser de rejilla, es una trampa mortal para sus patitas, que, si se quedan enganchadas, corren el riesgo de perderlas, y no queremos eso. Y cuidado, ¡los jerbos saltan mucho!, pueden llegar al medio metro. Aseguraos de que el techo este cubierto, con algo que evite que se escapen, pero que tenga ventilación.
Tampoco pueden faltar un comedero y un bebedero, existen un montón de modelos adecuados para este tipo de roedores. Los podréis encontrar en nuestra selección de productos en la tienda. Y diferentes juguetes, pensad que, si son de plástico, los van a hacer añicos con el tiempo. Incluso les podéis instalar una rueda para roedores.
¿QUE COMEN LOS JERBOS DOMÉSTICOS?
Alimentar a los jerbos es realmente fácil, tenéis que pensar que son animales omnívoros y desérticos. O sea, pueden comer casi de todo y beben muy poca agua.
Lo ideal, es comprar pienso hecho expresamente para ellos. hecho a base de hojas, semillas y frutas deshidratadas. Pone la dosis diaria que se les tienen que dar, para que no engorde u os quedéis cortos. Como siempre en nuestra sección de la tienda vais a encontrar una selección de los mejores accesorios y cuidados del jerbo, como piensos para jerbo. No os olvidéis de visitarla, para que vuestra experiencia con estos animalillos sea más fácil y placentera.
También necesitan comida fresca, aunque en menos cantidad y no toda les sienta bien. Se les puede dar de comer desde jamón dulce, queso, huevo duro, pan o galletas, yogurt, acelgas, pepino, zanahoria, alfalfa, manzanas, uvas, en resumen, casi todos los tipos de frutas y verduras que hay. Los alimentos prohibidos para el jerbo son la cebolla, el ruibarbo y los alimentos fritos o procesados.
Lo ideal, es que todo este tipo de alimentos frescos se los deis tres o cuatro veces por semana. Primero tendréis que comprobar que le sienta bien a vuestra mascota. Para saberlo solamente tendréis que hacer la prueba de los tres días. Consiste en darle una pequeña cantidad del alimento que queráis, el primer día, al siguiente un poco más de cantidad y al tercero la cantidad total. Si se come el alimento y no ha tenido indigestión ninguno de los tres días, el jerbo ya se habrá acostumbrado y le sentará bien.
Además del pienso especial para ellos y la comida fresca, a los jerbos les encantan los insectos y algunos pequeños invertebrados. Los podéis encontrar en las tiendas de animales o incluso puede que los cacen ellos mismos. No es un alimento necesario para su alimentación. El pienso que le vais a suministrar ya lleva la cantidad correcta de proteína. Pero en mi opinión les ayuda a no olvidar sus costumbres de cuando eran animales salvajes, sobre todo si los cazan ellos mismos.
Aunque son animales desérticos y casi no beben agua. No podéis caer en el error de pensar que no la necesitan. Es cierto que extraen la mayoría de la hidratación necesaria de los alimentos que comen. Pero igualmente necesitan agua siempre a su disposición, eso sí, en pequeñas dosis. También tenéis que saber que lo mejor es que se les suministre el agua en botellas especiales con pipeta, nunca en un bol, ya que tienen la costumbre de enterrar tanto la comida como el agua, incluso con el bol.
Y para finalizar este apartado trataremos sus alimentos preferidos, y que solamente se los podemos dar de vez en cuando para premiarlos. Las chucherías preferidas de los jerbos son los frutos secos, siempre crudos y sin sal, no os olvidéis. Las almendras, los piñones, las avellanas o las nueces van a hacer las delicias de vuestro jerbo y seguro que os lo agradece.
¿CÓMO SABER SI TU JERBO ESTÁ ENFERMO?
Como todos los animales exóticos, es recomendable tener siempre localizado un veterinario con conocimientos sobre estos, para que en caso de cualquier duda o problema que tengáis, sepa cómo debe actuar.
Lo primero que tenéis que hacer una vez hayáis adquirido vuestras mascotas. Es llevarlo a que le hagan un análisis coprológico, para descartar que tengan parásitos intestinales. La mayoría de veces, si los habéis comprado o adoptado en un centro especializado, ya lo tendrán hecho. Y después con una revisión cada medio año bastará para asegurarnos que cualquier enfermedad que no podamos detectar a simple vista, el veterinario la coja a tiempo y pueda aplicar el tratamiento correspondiente.
Existen un montón de síntomas que os tienen que poner en alerta, y que lo mejor es que lo llevéis al veterinario, por si acaso.
En esta sección os vamos a enumerar unos cuantos. Pero siempre que notéis que vuestra mascota ha cambiado en su comportamiento o físicamente, no dudéis en llevarlo al veterinario.
Aturdimiento: los jerbos pasan muchas horas durmiendo, pero si notáis que cuando están despiertos están apáticos, es un claro síntoma de que algo no funciona.
Temperatura corporal: su temperatura ideal son los 38 grados. Pero se enfrían con rapidez si están enfermos e incluso pueden llegar a bajar de los 30 grados.
Delgadez: si pierden peso rápidamente, es un claro síntoma de enfermedad. Normalmente es porque dejan de comer o beber porque no se encuentran bien o porque les duelen los dientes. Si probáis de darles sus chucherías preferidas y no se las comen, preocuparos, seguro que están enfermos y lo mejor es llevarlos al veterinario.
Aseo del pelo: si dejan de cuidarse su pelaje o no se limpian. También es un claro síntoma de enfermedad. No os obsesionéis, tenéis que pensar que es un animal muy juguetón, y lo normal es que se despeinen, el problema es si después no se acicalan.
Respiración: la respiración de los jerbos es rápida. Si notamos que les cuesta respirar o que hace ruido al hacerlo, también es un claro síntoma de enfermedad cardio-respiratoria. También puede que les cueste en momentos de estrés, y se les pasará cuando los tranquilicemos.
Verrugas o bultos: estos animales son propensos a que les salgan tumores. Si detectáis alguno, es conveniente que el veterinario les haga un seguimiento, por si no son benignos.
Mal olor: si su jaula esta correctamente higienizada y aun así desprende mal olor, es probable que tenga problemas de diarrea.
Y, por último, solamente como opinión y que además me gusta ponerlo en todos mis artículos sobre mascotas roedoras. Os voy a decir que estamos acostumbrados a que, si una mascota tipo gato o perro se ponen enfermos, llevarlos al veterinario. Pues un jerbo igual, existen varias enfermedades tratables, que cogidas a tiempo hará que nuestra mascota llegue a vivir mucho más tiempo y con más calidad de vida. No por ser una mascota relativamente económica de mantener y sustituir por otra, tenemos que dejar que muera. Es importante recordar que es un ser vivo.
No voy a hacer una lista de las diferentes enfermedades, pienso que lo mejor es dejar este espacio a los veterinarios, que saben mucho más. O sea, siempre que notéis algunos de los cambios de comportamiento tanto físicos como de estado de ánimo de vuestro jerbo. No dudéis en llevarlo al veterinario para que le haga una buena revisión, seguro que os atenderán perfectamente.